El lugar es acogedor, tiene cómodo mobiliario, buena iluminación en comparación con otros lugares de comida italiana por su temática, la atención es buena, son amables y sencillos, la comida es deliciosa, es la primera vez que voy al lugar y pedimos pizza de pollo, una lasagna de pollo en salsa Pomodoro y una limonada, los precios son accesibles y por el sabor de la comida están súper bien, temía consumir la lasagna en esta salsa porque a veces es ácida y no me hace bien pero aquí esto no sucedió, todo muy natural y delicioso, el queso en la pizza de verdad te atrapa y la limonada también es muy natural y deliciosa, por su precio super mi expectativas ya que generalmente en otros lugares la bebidas son más costosas y con menos sabor. El postre que lleve realmente me parece como un tres leches con dulce de leche y está delicioso también. Los recomiendo ampliamente son mis nuevos favoritos para pizzas y comida italiana!

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