Bonito lugar, cómodo y con ambiente abierto y cerrado según el gusto. Comida mediterránea balanceada y con buen gusto. Particularmente fui por el cordero, y aunque solo habían costillitas en el menú, en realidad estaban muy gustosas y suaves. Comimos una buena variedad de platos y de verdad nos gusto y lo recomiendo, para cambiar un poco de lo más tradicional y degustar platos de otros paises. Probamos 2 postres diferentes y con buen sabor, algo distinto a lo habitual. Así que los invito a atreverse en una gastronomía de otra latitud.