Muy mala experiencia. Vine a conocer las nuevas instalaciones de Paddle de Obarrio y pedimos un pie de limón, tiramisu y un café... Y para mi sorpresa mi pie estaba mega viejo y el tiramisu estaba descompuesto al igual que el segundo dulce que pedimoa en reposición del primero. El personal escasamente conocía lo que tenía en el menu. Ojalá logren mejorar estas cosas. No vuelvo más.