Hemos venido con unos amigos y hemos "descubierto" Santa Rita como una de las mejores opciones gastronomicas en el Casco y la ciudad. Siendo un grupo numeroso, degustamos una variedad de entradas, platos principales y postres... las papas bravas, los portobello rellenos y las alcachofas salteadas estupendas; el arroz con rabo de toro y la entraña de antologia; y la crema catalana para repetir. Si todo esto lo aderezamos con un burn vino, un ambiente informal pero agradable y una excelente atención, solo queda volver.