Ir a Salotto es una experiencia gastronómica y con arte incluido. La comida puede tener el mismo sabor que tendría en las costas de Italia, conservando la esencia de la nonna, sabor a casa y sin complementos artificiales. Además puedes probar un Limoncello para cerrar tu comida. Todo esto al mismo tiempo que admiras sus paredes llenas de obras de arte que apoyan al artista Panameño.
1 Me gusta