Tanto la terraza como el salón son muy agradables para una cena de negocios, en familia o en pareja. La comida fue en general muy buena. Especialmente recomiendo el Mac&Cheese. Este viernes tenían un violinista que puso un ambiente muy especial en el salón. Lo mejor de toda la experiencia fue la atención, especialmente del mesero que nos atendió (Luis), fue amable, respetuoso y con un excelente conocimiento de la carta