Me encanta el concepto de reunir lo mejor de las tradiciones regionales de Panamá en un solo lugar. La comida es bastante buena con esa sazón tradicional, en mi última experiencia lo único negativo fue el alto precio de algunas elecciones como una “pipa” en 5 dólares, adicional de prohibirnos tener cuentas separadas en una mesa de más de 16 personas que a pesar de estar juntos no nos conocíamos.