El local está bien espacioso y acogedor. El servicio puede mejorar, pero tenían dos saloneros para atender todas las mesas, un domingo en la mañana que estaba lleno. la comida llegó fría pero tenía buen sabor. Probamos desayuno Keto clásico, Desayuno con huevos Benedictos y tostadas francesas veganas (las mejores de los 3 platos).