me sorprendió la calidad de la comida, es un restaurante gourmet pequeño de unas 10 mesas, la atención es muy buena hay bastante personal y amable, el propio chef esta pendiente de todo y de ir a las mesas. la carta es pequeña pero buena , yo pedí el tuétano, dos platos (cordero y conchas) un postre , 2 copa de vino y un aperol ,,, pague 118. para dos personas . no es un restaurante económico , pero si gustas comer algo de calidad vale la pena probar, volvería. /solo recomiendo ser mas generosos en las porciones.