Hacia varios meses que no veníamos a este restaurante. Después de tanto tiempo, encontré que el restaurante estaba repleto. Es 100% cierto que es un lugar donde se agrupan las familias para disfrutar de un momento juntos. Como siempre, pedimos la BERENJENA A LA VINAGRETA y el PAN PITA como entrada y para compartir. Yo pedí como plato fuerte el FETTUCCINI CARBONARA. Me gustó muchísimo, aunque no es el original carbonara hecho en Roma. Pedimos dos postres para compartir.
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