Fuimos al restaurante y cómo siempre lo han caracterizado la comida estuvo riquísima ( no le puse excelente porque los dumplings me llegaron fríos ), pedimos también sushis, pulpo, arroz de pato, pescado róbalo, baos de carne, postres y diferentes cócteles que estaban riquísimos. El ambiente muy bueno pero se pone ruidoso, tienen show ahora pero la única forma de apreciarlo es estando cerca del mismo o verlo por las redes sociales o simplemente moverse de la mesa e ir a verlo ya que no lo hacen en todo el restaurante. El servicio o atención ( a excepción del mesero Henry ), estuvo muy malo. Hice mi reserva con anticipación de una semana y les pedí una buena mesa para cuatro personas y cerca de su famoso show para poder disfrutar tanto la comida como el show. Me dieron dos mesas redondas a la entrada del restaurante, detrás de las anfitrionas, mesas de dos personas las cuales las juntaron y estuvieron muy incomodas para poder cenar en familia. Al estar en la entrada, el aire no se sentía y hacía un poco de calor. Cuando les solicite el cambio de ubicación se rehusaron de darme otras mesas ya que las mismas estaban ya reservadas para su clientela/ amistades privadas. Los meseros en general les falta mucha experiencia y tienen mucha falta de profesionalismo en tanto al conocimiento de los platos de comida, limpieza de las mesas y cómo servir la comida. Quedé muy decepcionado del restaurante ya que cómo siempre he dicho: ambiente, calidad de comida y en especial atención/ servicio de su personal son indicativos muy importantes para poder regresar más pronto a un mismo restaurante. Definitivamente extraño el viejo Salvaje !!

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