un ambiente distinto , lleno de antigüedades y carros de antaño. de la mano del ilustre Alexis Montilla que no sólo deja la huella en Venezuela sino que ahora expande su legado a otros horizontes ideal para unas copas , el menú es muy limitado espero lo vayan ampliando , sabemos que es difícil la situación. x el covid. hay opción al aire libre y adentro es muy espacioso la atención súper buena. algo no común en Panama muy recomendado