El lugar tiene un ambiente increíble. Muy bien pensado, diseñado y desarrollado el concepto de las representaciones por provincias. Además es bastante amplio y tiene dos terrazas. El menú es bastante reducido pero completo. Pedimos de entradas unos anillos de calamar y carne en palito. Nada que envidiar de las que venden en las ferias y desfiles, estaba deliciosa! Como plato fuerte pedimos filete de pescado, lechona acompañados de arroz con coco, patacones y ensalada. Me encantó el detalle de las pequeñas pailitas donde vienen las salsas, son muy curiosas. En fin, muy buen lugar para comer, disfrutar la brisa y en cada visita se puede optar por visitar una provincia diferente. Me parece un muy buen lugar de inicio para los turistas y que tengan una idea de las bellezas que tenemos en Panamá.

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