Se me ocurrió la 'genial' idea de comprar desayuno panameño en MOLAS. Compramos un desayuno chorrerano y un desayuno chiricano. El bollo era la cosa más asquerosa que he probado en mi vida. Parecía como esos de Melo que compras en el Super, pero más aguados. La carne estaba tiruda. La lechona era más grasa que carne. Los huevos sabían como a huevo de cajeta. Por alguna razón incomprensible mis almojábanos tenían azúcar. En resumen: primera y última vez que compro en este lugar. Sale mejor y mucho más barato comer en cualquier fonda por ahí.