Tengo opiniones adversas con este lugar. Una vez comí una deliciosa Danesa y fui en otra oportunidad y comí una brioche con frutos rojos que no tenía sabor alguno. En él café nunca fallan, es muy bueno. El lugar agradable, tiene una terraza muy linda. Añoro los postres que tenían en Venezuela, creo que acá les falta algo que no logra crear lo mismo, tal vez ha sido cuestión del día.