Fuimos para aprovechar el descuento de Degusta. Al principio no atendió una chica que pareciera que estaba teniendo un mal día, luego nos atendió otro muchacho muy amable y la cosa cambió. De entrada ordenamos una sopa de tomate y unos “bastoncinis rellenos de queso” (un nombre bien italiano que se veía atractivo) y para nuestra sorpresa eran unos viles tequeños, que estaban bueno, pero caros (17 palos). De plato fuerte ordenamos risotto de dúo de tomates y unos ñoquis de camote en salsa blanca, estaban muy buenos. Nos recomendaron un vino que estaba normalón.
1 Me gusta