Me gusta que tienen buena variedad tanto para los amantes del sushi como para quienes no les gusta e inclusive para los chiquitines. El ambiente es oriental y moderno, muy buena música, ideal para comer, conversar y pasarla bien. La terraza de afuera, en las noches es un poco oscura pero se disfruta de la brisa e intimidad, a diferencia de la terraza que está dentro del mall que tiene un poco más de ruido por ser compartida con otros restaurantes.