Atención del personal mediocre, demuestran pereza y frustración. El latte que pedí no lo pude beber en 30 minutos porque estaba muy caliente. Eso no lo hace in barista de verdad. La calidad del cafe habla por el establecimiento y si está muy caliente, su valoración decae. Mientras uno te atiende a ti; el barista entrega un café pasando su brazo frente a tu cara para darle la bebida a otro comprador. No es nada cómodo y es grosero, el espacio muy reducido.