Tiene varios factores positivos este restaurante. Entre estos, suficientes estacionamientos y bajo techo, importante por las constantes lluvias. Habré hasta la medianoche por lo que sirve para matar el hambre hasta bueba hora. Tiene espacio cerrado y otro espacio abierto. La comida es bastante aceptable y mucha variedad. Destacan los emparedados, a veces el salmón y por supuesto los churros con un buen cappuccino.