Este restaurante es una delicia. Lo mejor fue la atención son amables, muy atentos y una muy buena interacción con el cliente. Como cortesía nos dieron a degustar vino, por su puesto el pan de la casa y la ensalada, todo muy muy rico. De entrada pedimos lasagna frita y dip de espinaca. La pasta carbonara con pollo y camarones y el salmón estan riquísimos. Te cantan cumpleaños y de cortesía te regalan un dulcesito. FULL RECOMENDADO!!!! De ahora en adelante uno de mis favoritos.