El lugar no cubrió las expectativas. Primer fallo, un lugar de cañas y tapas y no tienen cañas, solo cerveza por botella. En cuanto a la comida las papas bravas nada del otro mundo, los pimientos de padrón sí estaban buenos al igual que la selección de montaditos español. La joven que nos atendía estaba más pendiente el partido que transmitían en TV que de la atención; a la hora de dividir la cuenta lo tuvimos que hacer nosotros porque la mesera dijo que era muy difícil hacerlo. En fin, no volveremos al lugar!