Fui en la semana a saciar mi antojo de dulce y no me decepcionó para nada. El lugar es precioso y la música agradable, que deja conversar, es perfecto para ir a comer un pastelito mientras se trabaja en la computadora. El señor que nos atendió se mostró amable y parecía conocer todo el menú, ya que le indicamos que nos gustaba y el nos hizo u as buenísimas recomendaciones. En cuanto a los postres, probamos tres: pie de limón, que estaba rico y se notaba que era hecho con lomos de verdad; milhojas de crema pastelera, la crema estaba súper rica y su consistencia perfecta; y sachertorte, este fue la razón por la que decidimos ir a Charlies Cream ya que desde hace rato vengo buscando un lugar donde lo hagan, la crema de chocolate estaba perfecta pero el bizcocho no sabía como el original.