Segunda vez que asisto al local, y definitivamente fue mi visita favorita. Empezando por la atención, el joven Eduardo es un salonero maravilloso, conoce los platos y sabe recomendar buenas opciones. El plato que pedimos, el trío de milanesa, lasagna y pasta alfredo simplemente espectacular. La relación precio-calidad, siempre será de mis favoritas. Nota: Si rellenan la encuesta de satisfacción, en la siguiente visita tendrán un dolcini gratis. Me dieron el de fresa, riquísimo!!