Uno de los restaurantes Asiáticos más variados de la ciudad, me encanta la terraza. Esta llena de plantas y no parece que estés en medio de la ciudad, no hay sonidos de la ciudad que no te dejen conversar en paz. De noche el techo es retráctil y se puede ver el cielo estrellado, no es caliente, súper fresco. Los rock shrimp tempura siempre serán de mis entradas favoritas al igual que el edamame picante. Y el mejor postre en mi opinión siempre será el postre de frutas y galleta + helado de mango y malvas, es increíble y no empalaga.