Fuimos a desayunar una capacha y desayuno criollo, el queso y los complementos súper ricos, solo que la arepa y la cachapa no estaban recién hechas y nunca sabe igual recalentado, es preferible esperar unos minutos más y que lo saquen directamente del fogón. El ambiente es divino, parece cualquier lugar en los llanos venezolanos.