La noche del sábado 10 de agosto estuvimos celebrando nuestro aniversario de bodas, escogimos este restaurante y reservamos el balcón con una vista espectacular del Casco Antiguo, la atension fue muy exclusiva el ambiente excelente comimos un aperitivo tomamos Mojio, de plato fuerte escogimos el cochinillo pibill y el Ribeye steak, de postre frutas texturizadas y cheescake de plátano, cada plato más delicioso que el otro, lo súper recomiendo uno de los mejores restaurantes por el momento que llena todas mis espectativas