Es un restaurante con muy buen ambiente, si tendría que calificar la atención del 1 al 5 le doy 10, muy buena la comida, desde que llegamos fueron muy amables y nos dieron unas entradas de cortesía, fuimos a celebrar el cumpleaños de un amigo y el Chef se las ingenio para mandarnos al final un dulce para cantarle a nuestro amigo, ya que no se vende postres, esto me pareció muy acertado y agradable para el cumpleañero. Es un lugar para ir a tomar algo y comer tapas mientras se conversa. El único detalle es el estacionamiento, que hay que ingeniárselas e ir a pie hasta el restaurante, sería una buena idea si tuvieran servicio de valet parking. Totalmente recomendado.