Los desayunos y postres de este lugar son excelentes, franceses en su mayoria. Tienen diferentes opciones de combos con jugo y cafe, totalmente deliciosos, con unos contrastes al paladar esquicitos. Pedimos hasta para llevar, unos croissant de chocolate y unos baguette, porque tienen muy buena panaderia! La atencion es muy buena y eso que estaba demasiado lleno el lugar y el ambiente es muy acogedor