El ambiente es súper bueno, un poco apretado y se llena bastante, pero buen spot. La comida no me gusta para nada, siento que es mala, simple, no tiene buen sabor. El servicio súper lento, a la mesera se le olvidaba traer algunas cosas que pedíamos, no anotaba la orden corriendo riego de traer mal un plato (cuando son varias ordenes para 1 mesa). En fin siento que es un lugar para ir a beber un par de pintas, por que los tragos tampoco me gustan y pasar un ambiente nice! Pero para comer no lo recomiendo para nada!