El ambiente es relajante, y se enfatiza más con la música de fondo, la cual fue de mi agrado al ser EDM; pero, puede que a los que no les guste tal género no le tomen una mínima importancia. El rollo impone su presencia en el plato, la textura del salmón se asentúa con el wasabi y la compañía de la bebida natural equilibra los sabores. Muy grata experiencia.