Fuimos en jueves social, asi que mas aue comer fue degustar mientras tomábamos algo, picamos alitas con sus salsas blue cheese y picante ( ricas como siempre) y aprovechamos la hora de happy hour (después de las 4p.m) para tomarnos unas margaritas frozzen. Como siempre buen sabor, buen servicio y precios accesibles.