Hoy visitamos Fosters en Costa Verde y la verdad nos encantó. Un ambiente acogedor, la brisa deliciosa propia del verano y una atención personalizada. Ordenamos margarita de Maracuyá coronada de tomar y un club sándwich con patacones, excelente porción. Los ingredientes todos frescos y de calidad. Definitivamente recomendado 100%.