El ambiente es muy fresco y a la vez relajado creo la decoración y el espacio brindan esa sensación. La comida fue lo que realmente nos sorprendió: la hayamos muy deliciosa y en buen precio para la porción. El helado frito definitivamente no puede faltar. Tienes que probarlo. Ha pasado una semana de haber ido y ya estoy cuadrando para volver. Gracias por las atenciones. Tienen silla de bebe y flexibilizaron el menú a fin de que nuestra beba pudriese comer también. 😘