Fuimos a ver un partido de Alemania contra Suecia y aunque perdió nuestro equipo,la pasamos muy bien ... me gusto mucho las cervezas y mis papas estuvieron deliciosas además el dueño del local fue muy amable y nos dejó sentar en su mesa.El servicio es un poco lento pero El ambiente es divertido y te sientes en un auténtico restaurante alemán.