La gran atención es uno de sus mejores atractivos. La jalea es un plato que no puede faltar. Degusté el risoto de mariscos y en menos de 1 semana ya lo estaba solicitando de nuevo; increíble textura, punto de cocción perfecto del arroz arbóreo, camarones en su punto, sabor increíble, y muy grata presentación; lo recomiendo con los ojos cerrados. El sudado de pescado también estaba genial. Kuddos.