Para empezar encontré el restaurante un poco chico / apretado, estaba lleno y el servicio al principio estaba malo y lento después se mejoró bastante. El ambiente un poco caluroso, tuvimos que cambiar de mesa porque teníamos calor. Comida: el carpaccio de corvina y mero y las brochetas estaban muy ricas. De los platos fuertes: el pescado a la plancha y el de salsa verde estaban deliciosos. El salmón estaba muy bueno. La carne Rib Eye estaba ok, muy por debajo de lo que esperaba, no tenía sabor y parecía un filete de carne en vez de un Rib Eye. Los precios son un poco cariñosos. Y no me dieron el 50% de descuento de degusta en la cuenta final, según el restaurante no lo da en licores sino en la comida solamente.