Este lugar nos encantó. La decoración es divina, con un estilo moderno y totalmente temático. El servicio estuvo bien, admite mejoría. Jamás se percataron cuando nos quedamos sin agua. La comida fue toda experiencia. Todo nos gustó. Los dátiles estuvieron increíbles!! Pedimos la ensalada Cho, rollos Cho y Trío de Okinawa, entraña con una cebollas caramelizadas (con tonos cítricos), de ensueño, y puré verde. El puré tiene aguacate y pimienta roja en grano. Qué buena combinación! Todo estuvo delicioso. Mi favorito fue el Trío de Okinawa, cuánto sabor! Los postres otra maravilla... Probamos el tres leches, que lo preparan en la misma mesa, sabor y entretenimiento! También pedimos los brownies, con un toque de mantequilla de maní y un gratinado de malva. Limonada con hierbabuena y un cóctel Lychees Guandong. El cóctel no lleno mis expectativas, pero creo que igual volveremos!

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