Por lo general vamos siempre a tomar café en este lugar, hoy simplemente hicieron el capuccino muy aguado y tuvieron una muy mala atención; tuvimos que devolver 3 veces un capuchino: la primera vez muy aguado, la segunda vez lo traen amargo y luego de volver a quejarnos nos quieren ofrecer un poco de leche pero quieren que les paguemos primero la leche antes de traerla, al final le pagamos los capuchinos y le dejamos lo que nos trajeron intacto, siempre hemos sido regulares en ese lugar pero definitivamente apartar de hoy ya perdieron 4 clientes regulares, un restaurante o cafetería decente y de calidad nunca nos hubiesen cobrado eso e inclusive nos hubieran ofrecido algún otro tipo de café o capuchino para enmendar la mala atencion y servicio, y la gerente nunca se preocupó de lo que estaban haciendo sus subalternos. Uno como dueño o gerente de un lugar siempre tiene que preocuparse por su clientela ya que es el motor y energía de cualquier negocio.