Fuimos para un almuerzo en grupo y nos sentamos en la mesa al ras del suelo que es mejor reservar para conseguirla. El ambiente es agradable aunque un poco oscuro y deben renovarlo un poco ya que se siente algo viejo. En cuanto a la comida, como siempre fresca, rápida y deliciosa. El mesero estaba muy informado del menú y presto a hacer recomendaciones. Muy recomendado!