El local está céntrico, en la plaza mejor ubicada de Penonomé. No es muy grande pero cumple su función. Pedimos una familiar Paul Costello y la velocidad en que nos entregaron nos sorprendió, a pesar de que no éramos los únicos en el local. El servicio bastante bueno orientándonos sobre qué elegir en su menú. Sus pizzas son de las mejores entre los restaurantes de servicio rápido.